CartagenaAún recuerdo el mar de mis infancias allá en la simple Cartagena,
en la romántica mañana de un niño de primaria ,
con pantalones cortos y muchos sueños por madurar ,
un curso bullente , tren popular y necesario,
mechón salvaje de humo negro ,
Estación y pitazo , gente , ruido de alegres paseantes ,
cerros , mi profesora , y el mar , el mar .
Las olas creaban el juego infinito ,
la danza más loca que alguna vez soñé poder contemplar ;
besaba las rocas un sol de Diciembre ,
aladas gaviotas gritaban su espanto ,
amor , amor incipiente , niño y soledad .
Me sentí tan pequeño ,sobre mi cabeza el cielo se hundía
Y en la arena ardiente mi huella creaba
Un mundo de formas , montes , valles , dunas ,
Túneles sin tiempo , bella poesía .
Ese mar me hablaba , vi su boca ancha ,
Parecía comerse toda mi estatura ,
No tuve palabras para responderle ,
Me sentí ofendido y corrí asustado ,
Lancé tres pedruscos ; quería acallar esa voz potente ,
El feroz rugido con que me espantaba .
Transcurrió un buen tiempo antes de aquietarme ,
El justo momento para recordar
Que yo era indefenso ante ese gigante ,
Ese tiranuelo que mandaba el mundo ,
Me senté en la arena , le dije en voz baja :
“ Mar , amigo mar , qué bueno encontrarte
en estas soledades , qué bueno es hallarte
y saber que existes , yo nada sabía
de tu vida hermosa , ahora que te veo
y entiendo tu estampa ,quiero que tú sepas
que yo te respeto .
Sé de lo importante que eres para el hombre ,
Y de lo infinito de tus mil batallas ,
Que vives en guerra pues quieren domarte
Para así sentirse dueños de tu risa ,
Amos de tu furia , pero es imposible
Y eso tú lo sabes.”
Luego eché a correr por la arena ardiente ;
Se hizo fiero el aire , y entre la gente me perdí ansioso por lo que veía ;
Todos mis amigos , todo el curso entero corría extasiado ,
y en ese tumulto una mano suave me detuvo el vuelo ,
me sentí gaviota , y dos ojos bellos , los de mi maestra ,
me calmaron todo ese gran revuelo ,
Te ha gustado ésto , mi loco chiquillo ,
No supe que dije , si es que dije cosa ,
El caso es que ahora que me siento viejo ,
He vuelto a sentir el mismo sosiego ,
El mar lo sentí dentro como ardiente leño ,
Como el agua clara que baja en silencio ,
Nunca me ha dejado ese sortilegio ,
Ese gran encanto de ser tan pequeño ,
Tan grano de arena , tan mortal y eterno .